sábado, 26 de agosto de 2017

No soy un millenial


Los medios de comunicación han abusado de la palabra "millenial" que ya nos tiene hartos a muchos. Antes el término era "los jóvenes" pero algún publicista pensó que un anglicismo ya utilizado comunmente en EU sonaba más "Kul" y por eso eligió adaptarlo, sin traducirlo al español.

El planteamiento es simple: Se supone que, como el zodiaco chino, se define por en qué año hayas nacido. Si naciste entre 1980 y 1999, entonces te tocó el cambio de milenio cuando eras niño o adolescente, y eres "millenial". Las características varían dependiendo de quién las establezca, pero según diversos medios, son una generación arrogante que gasta su dinero en viajes, se niega a invertir, ya no quieren empleos de oficinistas pero la mayoría los terminan tomando, quieren que los multimillonarios sean presidentes... En fin, cosas contradictorias. En lo que muchos no se contradicen, es que son una generación hedonista, ya que sus padres prefirieron darles una infancia feliz, en lugar de una estricta. Entonces, les tuvieron mucha tolerancia en su crianza, que los hicieron unos adultos consentidos y que creen que muchas cosas se pueden obtener al hacer un berrinche.... y algunos lo logran incluso hoy.

Pero el punto aquí es: ¿por qué no soy uno de ellos?


Fui educado a la antigua y no me concedían todo con tal de que "dejara de chillar". Prueba de ello es que mis padres sean más viejos que la Guerra Fría y mis únicos 2 hermanos nacieron en los 70s . Crecí jugando con sus viejos Fisher Price, Weebles y algunos juguetes de hojalata o madera, reliquias de generaciones quizás más antiguas. Yo no tuve Tamagochis ni Pokemon. La televisión no fue mi niñera.  Si acaso veía de repente caricaturas que ellos habían visto, como Los Pitufos, He Man, Looney Tunes, Thundercats, Transformers, o las de Ventana de Colores en el Canal 11, muchas de ellas que no puedo recordar sus títulos pero eran europeas. Lo más "moderno" que vi en ese entonces fueron los Power Rangers, Tiny Toons, Animaniacs (adoraba a Pinky y Cerebro), y mi favorita que era la serie animada de Batman (que compré en DVD y aún veo). Pero no crecí queriendo ser Gokú, ni copiando su peinado, y todas las frases de los Simpsons que conozco son por los memes que comparten mis amigos de facebook, y no por haber visto los capítulos donde las dicen. Vi en cine las mismas películas infantiles que los "millenials", algunas buenas como "Toy Story", otras bastante bobas como "Juego de Gemelas", pero también vi en cine "Batman Returns", "The Matrix" y otras joyas que mis contemporáneos descubrieron más tarde en VHS o DVD.

No escuchaba lo que mis compañeros de primaria. Esto no lo digo con afán de sentirme superior, escuché cosas mucho mejores que la moda noventera, pero también escuché cosas horribles de los 70s y 80s, aunque no las mencionaré ahora, pero definitivamente por "horribles" me refiero a grupos en español.  No conocí Star Wars por el estreno de Episodio 1, sino por los juguetes que coleccionaban ellos, quienes ya eran fans antes de que yo naciera, y los maratones en Canal 5, aunque siempre me quedaba con ganas de ver la 3 pero no me dejaban desvelarme hasta tan tarde (sí,  "El Retorno del Jedi" , la de los ositos de peluche , o "Ewoks" era la 3, no existía nada de eso que el Episodio 6 ni las precuelas, ni Rogue One, etc.). Hoy cada uno de ellos es casado y tienen 3 hijos, incluso los mayores de éstos podrían entrar en la clasificación de millenials. Tampoco me gustaban los "juegos" de McRoñas, esas tuberías para niños llenas de electrostática con albercas de pelotas y con olor a calcetín de niño clasemediero (porque te obligaban a quitarte los zapatos) y no puedo creer cómo hay plazas que incluso cobran la entrada hoy a juegos así. Yo jugué en resbaladillas, columpios,  pirámides con tubos con forma de aros, etc. que quizá tenían pintura de plomo potencialmente tóxica, pero eran juegos hechos en México estaban al aire libre. Es triste ver cómo ahora fueron sustituidos por juegos de plástico hechos en China y con piso de hule espuma... sólo algunos parques olvidados los conservan, oxidándose lentamente.

Quizás algunas características son inevitables, como el hecho de que aprendiéramos computación antes que nuestros padres y ellos nos pidieran ayuda para usar la tecnología. Los nacidos en los 80s y 90s somos la primera generación en toda la historia que tuvo el deber moral de instruir a sus mayores en algo, pero lamentablemente eso derivó en actitudes arrogantes, porque ahora muchos piensan que por su ignorancia en cuestiones tecnológicas, las generaciones viejas son obsoletas o lentas y sus consejos no valen la pena. Aunque yo entré a la era tecnológica después de los de mi edad, y aprendí a usar una computadora hasta los 11. No tuve un celular hasta que tuve 17, lo compré con mis ahorros y era un modelo ya en parte obsoleto.

 Pero cuando sacaba malas calificaciones, me regañaban a mí, no al maestro. Cuando yo quería un juguete, aprendí que la mejor manera de tenerlo era ahorrando, no enchinchando a mis padres para que me lo compraran. Y salía de mis "domingos". No como "premio" al más chillón 1995. Quizás mi crianza y las referencias que obtuve a partir de mis hermanos no fueron perfectas, pero no lamento nada.

Incluso hoy, prefiero informarme de algo leyendo, en libros o artículos de internet, que con los dibujitos de "pictoline" o "el espíritu de los cínicos", o peor aún, viendo videos en Youtube de alguno de esos otros "millenials" ricos que empezaron grabándose haciendo idioteces, y ahora se dedican a "informar" sobre cosas, ya sea de sus viajes, terror, cine, cómics o política.. porque esas personas viven de la flojera del internauta que prefiere todo explicado por una voz, que poner a trabajar su poca o nula habilidad lectora, y gracias a esos videos, ya se sienten expertos en todo. Tuve desde niño un interés por lo antiguo, lo pasado de moda,  lo obsoleto, lo raro,  lo que a ninguno de mis compañeros de clases les gustaba y quizás eso influyó en que estudiara historia.  Ahora ya se puso de moda ser "retro", o "vintage" y comprar cosas que parecen antiguas, pero en los 90s no. Aunque no los imagino dejando su teléfono con pantalla táctil por un Nokia ladrillo, ni su iPad por una Laptop con Windows 98 y un disco duro de 4 Gb.

Por eso digo; no soy un millenial. Pónganme en la categoría que quieran, pero esa no. Quizás soy alguien de la generación X, que comparte edad con los millenials.